Algunos usuarios se quejan de que no pueden escuchar en condiciones su música preferida (o cualquier otro contenido sonoro), por culpa del bajísimo volumen de sus altavoces. ¿Cuál es la causa de este problema? ¿Por qué se escuchan bajo los altavoces de repente?
Para buena parte de la comunidad de usuarios, este es un misterio sin resolver, y ha de conformarse con seguir escuchando las música a volumen bajo. En este artículo, vamos a tratar de descubrir las causas de este molesto fenómeno y, por supuesto, darle una solución. Si tú también te preguntas cuál es el motivo por el que los altavoces se escuchan bajo, te invitamos a que nos acompañes.
Causas por las que los altavoces se escuchan bajo
Lo cierto es que pueden ser muchas, y muy variadas, las causas de este problema… Pero vamos a recopilar las más plausibles para que, en caso de que alguna sea la que te afecta a ti, puedas identificarla y darle una rápida solución.
Dicho esto, a continuación repasaremos las principales causas de por qué el volumen de los altavoces es tan bajo:
- Hemos olvidado subirlo: parece una tontería, pero la principal causa de que muchos usuarios sufran un volumen demasiado bajo es que se olvidaron de volver a subirlo después de bajar o silenciar el volumen.
La solución a este problema es bien sencilla, pues bastará con subir el volumen de nuevo para disfrutar del audio al volumen deseado. - Existe un control de volumen adicional: en ocasiones, si utilizamos algún dispositivo a modo de intermediario entre la fuente de sonido y los altavoces, puede que tengamos que ajustar 2 controles de volumen diferente, el de la propia fuente (por ejemplo, el televisor) y el del intermediario (por ejemplo, un amplificador o un receptor AV). Si uno de los 2 está bajo, escucharemos el sonido bajo a través de los altavoces.
La solución a este problema pasa por asegurarnos que todos los controles de los aparatos o dispositivos que intervienen en la emisión del sonido tienen el volumen ajustado al nivel correcto. - Configuración de audio incorrecta: podemos sufrir un nivel de volumen inusualmente bajo si, por error, cambiamos la configuración de audio de los altavoces. Por ejemplo, asignando un sonido envolvente o surround a un par de altavoces estéreo. También puede suceder que el balance de los altavoces esté modificado para potenciar un altavoz en concreto, disminuyendo el volumen del resto.
Para resolver este problema, no hay más que llevar a cabo una correcta configuración de audio en función de los altavoces que tengamos. Igualmente, habrá que comprobar si el balance es el correcto. Si no es así, habrá que situarlo en modo «central», para que el sonido se reparta por igual entre todas las cajas. - Cable del altavoz dañado o mal conectado: un volumen deficiente puede estar motivado por un problema en el cableado. Puede ser desde un cable dañado hasta una clavija sucia o mal conectada… Si nuestro equipo no está en perfectas condiciones no podemos esperar un sonido en condiciones.
Si este es el problema, revisaremos bien todo el cableado para asegurarnos de que no tenga pliegues muy marcados ni cortes, procediendo a su sustitución si fuese necesario. Igualmente, es aconsejable limpiar todas las clavijas y conexiones, y asegurarnos de que están bien fijas en el lugar correcto. - Altavoces en posición equivocada: al hilo del punto anterior, en ocasiones nos encontramos con un fallo en la colocación o asignación de los altavoces. Por ejemplo, si hemos puesto al altavoz derecho el cable del izquierdo, o viceversa. En función del tipo de sonido que estemos reproduciendo, podrían producirse fallos en la calidad de sonido, así como un volumen más bajo del habitual.
La solución a este problema sería revisar concienzudamente la instalación de nuestro equipo de sonido, asegurándonos de que la asignación de los altavoces es la correcta, y modificándola en caso de detectar algún fallo. - El altavoz está estropeado: este es el problema que no queremos sufrir… Si no identificamos ninguna de las causas anteriores, es posible que el motivo del volumen anormalmente bajo sea que uno de nuestros altavoces se haya estropeado.
Las posibles soluciones a esta circunstancia serían reparar el altavoz afectado (poniéndonos en contacto con el servicio técnico del fabricante) o sustituyéndolo por un altavoz nuevo.